Al cumplirse 5 años del terremoto 8.4 que provocó un tsunami en la región, el proceso de recuperación se enfocó en regenerar el territorio apuntando a soluciones estructurales que devuelvan al borde costero la seguridad.
Ministro de Vivienda y Urbanismo, Felipe Ward, señaló que el foco de este proceso no sólo estuvo en reconstruir, sino que también en prevenir.
Coquimbo. 14 de septiembre– De manera de prevenir y preparar a la región de Coquimbo para otro evento sísmico como el vivido el 16 de septiembre de 20115, es que el Ministerio de Vivienda Y Urbanismo generó un plan maestro que incluyen obras de espacios públicos y de vivienda con medidas de mitigación, de manera de prevenir, preparando a la infraestructura y a la comunidad a otro desastre de similares características.
Se determinó, tras un estudio de amenazas llevado a cabo por la comisión de Reducción de Riesgo y Desastres del Minvu, que el mayor riesgo en el borde costero de Coquimbo es la alta exposición a impacto hidráulico frente a un evento de tsunami. Luego de la ocurrencia del evento, existe una alta probabilidad de ocurrencia de inundación. Por lo tanto, se proyectó incorporar medidas de mitigación ante esa amenaza, en los proyectos a desarrollar por el ministerio en el sector.
Sobre el trabajo preventivo que viene trabajando el Minvu el ministro del Minvu, Felipe Ward, explicó: “Después del 27F, desde el Minvu hemos puesto el foco no sólo en reconstruir, sino que también en prevenir. Esa fue una de las grandes lecciones que nos han dejado estos eventos de la naturaleza. Y por ello, estamos trabajando en todo Chile a través de nuestro Departamento de Gestión de Riesgos de Desastres y Reconstrucción, en generar obras preventivas y en programas educativos para que tanto las ciudades como las familias estén mejor preparadas. Y en la región de Coquimbo, hemos desarrollado distintas obras de mitigación en el borde costero, que incluyen la construcción de un edificio de Integración Social tsunami resiliente. Así, y como nos ha pedido el Presidente Piñera, solo mediante una acción integral y conjunta de prevención de riesgos, se podrá enfrentar de mejor forma cualquier evento de la naturaleza”, comentó.
En tanto, la coordinadora de Reducción de Riesgo de Desastres del Minvu, Gabriella de Angellis destacó el trabajo que se está realizando en la región. “Estamos integrando una nueva perspectiva de generar medidas urbanas, de vivienda y educativas para preparar al territorio y a la población culturalmente a enfrentar eventos como los ocurridos acá hace cinco años. Debemos asumir que vivimos en un país sensible a eventos de la naturaleza a las que estamos más expuestos. Por lo tanto, debemos prepararnos siempre y ese es el trabajo del ministerio”, sostuvo.
Para disminuir la energía del impacto destructivo de un tsunami de características similares a las de 2015 y que baje el riesgo de inundación, se proyectó el diseño y obras de un Muro Verteolas a lo largo de los 4 Km de la costanera donde más afectó el evento de hace 5 años. Las obras se realizarán en conjunto con el Ministerio de Obras Públicas.
Luego del terremoto ocurrido en 2015, el humedal El Culebrón tuvo un fuerte deterioro por el tsunami ocurrido, ya que la fuerza del oleaje tuvo una presión suficiente de destrucción de aproximadamente 10 metros hacia el interior. El humedal tuvo un efecto de absorción, haciendo que los suelos arenosos y pequeños causes interiores, amortiguaron la entrada del mar hacia los sectores residenciales. Sin embargo, dejó afectada la vegetación endémica y la fauna que se localizaba en el humedal.
La intervención del espacio considera aportar a la conservación de especies de flora y fauna nativa, y al acercamiento de la sociedad a la naturaleza, sumado al mejoramiento de las condiciones de protector y amortiguador natural ante las subidas del nivel de agua, por inundaciones o tsunamis, además del rol que tendrá como un lugar de encuentro social cultural, científico, recreacional y turístico para la ciudad. El proyecto de paisajismo asociado al humedal y a la infraestructura urbana, hace un aporte significativo al espacio público, entregando una zona densa de vegetación que evacua las aguas superficiales además de filtrar los contaminantes que arrastra la ciudad hacia el humedal.
Se incorporarán vías de evacuación desde la playa hacia la calle Maipú y hacia la zona segura en calle Videla, que permiten atravesar el humedal de manera directa en caso de tsunami y conectar con las vías de evacuación urbanas hacia los puntos de encuentro seguros. Además, se iniciará este 2020 la ejecución de la conservación de la plaza Domeyko, que incorpora condiciones de accesibilidad universal y en función de abordar el mejoramiento integral del lugar, se licitará este 2020 el diseño de plaza Victoria en el barrio de Baquedano.
En noviembre de 2019 se iniciaron las obras del edificio de integración social “Los Fundadores” con características Tsunami resiliente que considera 249 departamentos en 16 pisos con 49 departamentos para familias vulnerables y lleva un avance del 15%. Una de las características que adoptará este edificio considera como medida primordial es que el primer piso no sea habitable para vivir y será de material ligero para que el impacto del agua en la estructura no genere escombros ni inundación. Todas las funciones que tiene el edificio en materia de habitabilidad ocurren desde el segundo piso hacia arriba
