Columna: “El sentido de urgencia en los planes habitacionales”

Desde el Minvu desarrollamos dos importantes desafíos que nos ha planteado el Presidente Gabriel Boric: el Plan de Emergencia Habitacional, que tiene entre sus principales objetivos entregar 260 mil viviendas durante el periodo de gobierno, y el Plan de Reconstrucción, para devolver la normalidad a sus vidas a las familias de la Región de Valparaíso que sufrieron la tragedia de los incendios de inicios de febrero pasado.

Para ambos planes, el Presidente nos ha pedido con especial fuerza imprimir un sello común: el sentido de urgencia. Como ministerio, buscamos permanente acelerar los tiempos de respuesta y, en este esfuerzo, hemos valorado e incorporado las nuevas tecnologías, como la vivienda industrializada. Esta puede resultar una alternativa sumamente útil en determinados casos, como en la reconstrucción, en áreas rurales y también en el desarrollo de edificios de viviendas, como el que ya iniciamos en la comuna de Lo Espejo, que beneficiará a 60 familias.

Por ejemplo, recientemente, en el campamento Manuel Bustos de Viña del Mar, comenzamos a instalar las primeras cuatro viviendas definitivas desarrolladas con tecnología de industrialización, la que se caracteriza por sus procesos estandarizados y controlados, los que disminuyen significativamente los tiempos de ejecución, reducen la posibilidad de fallas posteriores y son más sostenibles. Las viviendas tradicionales demoran, en promedio, un año y medio en construirse, en tanto que las industrializadas un 40% menos, pudiendo terminarse incluso en un par de meses, como se presupuesta para el caso de Viña del Mar. Cumplen con toda la normativa actual de construcción y con el alto estándar que hemos comprometido para las viviendas de interés social, con características como envolvente térmica o ventanas termo panel que mejoran ostensiblemente su confort.

Además, en el contexto del Plan de Emergencia Habitacional, impulsamos una agenda de industrialización, la que nos ha permitido que, a marzo pasado, contemos con quince “viviendas tipo industrializadas”, con tipologías certificadas por el Minvu a disposición de las regiones para su ejecución inmediata. Asimismo, abrimos este año un llamado para la construcción de mil 800 viviendas industrializadas específicamente en terrenos Serviu a nivel nacional y, además, proyectamos licitar 20 mil viviendas industrializadas más.

Trabajamos con sentido de urgencia, sin descanso, porque entendemos la magnitud de los desafíos. El Plan de Emergencia Habitacional, con su ambiciosa meta, que ya bordea el 50% de avance, y la reconstrucción, que tiene sus propias complejidades y dimensiones. Desde el Minvu redoblamos los esfuerzos en este ya entrado “segundo tiempo” del gobierno, porque tenemos un compromiso con las 260 mil familias que necesitan con urgencia de una vivienda y, ahora también, con las de Quilpué, Villa Alemana y Viña del Mar para que sus nuevos barrios y viviendas sean un lugar seguro desde donde mirar el futuro, con la certeza de dejar atrás el trauma de la tragedia.